top of page
DÍA 14
Julio 31 2012
Escuchábamos de todo en el cuarto de Violeta, pasos y cosas moverse, las llaves de agua del baño se abrían y teníamos que entrar a cerrarlas; siempre que nos acercabamos, los pasos cesaban. En la noche se puso peor, cuando intentaba dormirme escuchaba unos pasos distintos, unos pasos pesados en el pasillo, me sorprendió que mis papás no se despertaran (en cada ocasión que las cosas se ponían demasiado intensas, mi papá iba por mí y me llevaba al cuarto con ellos). Esa noche en particular no escucharon nada; intenté ignorar los ruidos, los pasos, poner algo de música en mis audífonos como siempre, pero de repente… un golpe me sobresaltó (algo fuerte en la habitación contigua) sentí la vibración en el piso, me quité los audífonos y con mucha atención, con un poco de ruido, pude escuchar claramente a Violeta llorar, por un breve momento en la habitación de ella, después unos pasos correr y perderse en dirección a la ventana, como si alguien se hubiera lanzado en ese momento (estaba impactada, no sabía lo que estaba pasando, no entendía que acababa de escuchar). Luego se oyó algo en el jardín, cerca a los botes de basura, me asomé y ahí parado en la oscuridad, logre ver claramente a Emanuel mirando hacia la ventana de Violeta, quieto, sin inmutarse ante mí, no se daba cuenta de que yo lo veía.
Por un momento sentí que todo estaba claro, Emanuel era el responsable de todo (todo encajaba), él pudo haber estado en la habitación momentos antes. Mientras salía disparada de mi cuarto hacia el jardín para confrontarlo, pude verlo escapar a toda velocidad; cuando iba saliendo al patio, saltando la pequeña reja, de pronto algo me heló la espalda de repente, mientras que Emmanuel huía, justo al lado de mí apenas de reojo, pude verlos… pude ver la silueta de los pies de Violeta colgando. Me detuve, sentí hormigas en las piernas, espalda, los brazos; sabía que tenía que entrar corriendo, escapar, pero mis piernas se quedaron rígidas en su lugar. Hacía un gran esfuerzo por no voltear y ver lo que sea que tenía detrás, estaba congelada.
De reojo vi como los pies seguían acercándose a mi, asi que tome fuerzas y salí corriendo. Puedo asegurar que en 3 segundos crucé la casa, subí las escaleras y comencé a tocar al cuarto de mis papás, por alguna razón, esta vez el seguro de su habitación estaba puesto sin voltear. Sentí claramente como la figura colgante recorría el pasillo hacia mi, se acercaba, y de repente, mi mamá me abrió; entré corriendo y me tiré a los brazos de mi papá, pidiéndoles (Con toda mi alma sollozando) que cerraran la puerta porque había algo en el pasillo. Ellos no vieron nada al asomarse por la ventana, mi papá solo dijo que había gente en la casa de enfrente donde vivía Juan Camilo, algo muy extraño porque se dormían muy temprano y ya eran pasadas las 3 de la mañana.
Un momento después, le mandé un mensaje y me respondió que por la mañana hablaríamos. ¿Está todo bien?- le pregunté, me respondió únicamente con un rotundo "No".
Los pasos ligeros al lado de la habitación volvieron, se escucharon durante toda la noche. Después supe que Emanuel había despertado a Juan Camilo llamándolo por celular y pidiéndole que saliera de su casa cuando recién había escapado de la mía, le dijo que era una emergencia y cuando salió le dio una lista que parecía que acababa de escribir apresuradamente; eran links escritos a mano y al parecer de memoria, links de videos de YouTube. “Vas a entender, vas a entender”, no paraba de repetir lo, salió corriendo cuando se los entregó.
El ángulo y los árboles no le dejaban ver hacia mi casa, pero Juan afirma que al voltear pudo ver a lo lejos entre ramas y hojas a Violeta, colgando en el mismo lugar en el que se había quitado la vida (sin duda le creí). No quise ver los vídeos, intenté, pero no pude, así que Juan decidió mostrarlos al día siguiente, a un amigo muy cercano del grupo.
© 2023 by A True Crime Podcast. Proudly created with Wix.com
bottom of page